Sonda Nasogástrica: Qué es, Tipos y Técnicas de Insercción

Descubre todo sobre el uso de la sonda nasogástrica

En este artículo, te explicaremos en detalle qué es una sonda nasogástrica y cómo se realiza la técnica de inserción. Seguro que si estás empezando a estudiar enfermería, te resultará útil saber todo sobre la sonda nasogástrica. Aquí te dejamos todas las preguntas que se suelen realizar para que al terminar de leerlo seas todo un profesional. ¡Sigue leyendo!

¿Qué es la sonda nasogástrica?

Una sonda nasogástrica es un tubo delgado y flexible que se inserta a través de la nariz y el esófago hasta el estómago. Se utiliza a menudo para proporcionar alimentación o medicamentos, o para drenar el contenido del estómago. También se puede utilizar para medir la cantidad de ácido en el estómago o para realizar una radiografía del estómago.

Las sondas nasogástricas se utilizan comúnmente en personas que tienen dificultad para tragar o que necesitan una nutrición adicional. También se pueden utilizar en personas que tienen problemas para controlar la cantidad de alimentos o líquidos que consumen, o en aquellas que tienen problemas para absorber los nutrientes de la comida. Si quieres saber más, te recomendamos leer tipos de dietas hispitalarias.

Tipos de Sondas Nasogástricas

Hay varios tipos de sondas nasogástricas, cada una de las cuales se utiliza para un propósito específico:

Sonda nasogástrica de alimentación: este tipo de sonda se utiliza para proporcionar alimentación a un paciente que no puede tragar alimentos por sí mismo. La sonda se conecta a una fuente de alimentación y se utiliza para suministrar líquidos o alimentos en polvo diluidos a través del tubo y directamente al estómago.
Sonda nasogástrica de medicamentos: este tipo de sonda se utiliza para administrar medicamentos a un paciente a través del tubo y directamente al estómago.
Sonda nasogástrica de drenaje: este tipo de sonda se utiliza para drenar el contenido del estómago. Se puede utilizar para eliminar el exceso de líquido o para vaciar el estómago antes de una cirugía.
Sonda nasogástrica de pH: este tipo de sonda se utiliza para medir la cantidad de ácido en el estómago. Se utiliza a menudo para evaluar la función del estómago y para ayudar a diagnosticar problemas como la úlcera gástrica o el reflujo ácido.
Sonda nasogástrica de radiografía: este tipo de sonda se utiliza para tomar radiografías del estómago. Se inserta una pequeña bola de plomo en el extremo de la sonda y se coloca en el estómago. Luego se toma una radiografía del estómago y se puede ver la posición de la bola de plomo en la imagen.

Ten en cuenta que cada tipo de sonda nasogástrica tiene sus propias instrucciones de uso y requisitos de cuidado. Sigue estas instrucciones cuidadosamente para evitar complicaciones y asegurar un uso seguro y efectivo de la sonda.

¿Cuáles son los calibres de una sonda nasogástrica?

Las sondas nasogástricas vienen en diferentes tamaños o «calibres», que se refieren al diámetro del tubo. Los calibres más comunes son de 8, 10 y 12, aunque también pueden encontrarse en otros tamaños.

El calibre más adecuado para un paciente depende de varios factores, como el tamaño y la edad del paciente, el propósito de la sonda y la duración del uso previsto. Por ejemplo, una sonda de calibre más grande puede ser más adecuada para un paciente adulto o para proporcionar alimentación a largo plazo, mientras que una sonda de calibre más pequeña puede ser más adecuada para un paciente pediátrico o para uso a corto plazo.

Es importante seleccionar el calibre adecuado para evitar complicaciones como obstrucciones o daños al esófago o el estómago. El profesional de la salud encargado de insertar la sonda nasogástrica deberá determinar el calibre adecuado en función de las necesidades del paciente.

¿Cuándo se debe colocar una sonda nasogástrica?

Una sonda nasogástrica se puede colocar en cualquier momento que sea necesario proporcionar alimentación o medicamentos a un paciente de manera intravenosa o cuando el paciente no puede tragar alimentos o líquidos por sí mismo. Algunas razones comunes para colocar una sonda nasogástrica incluyen:

Dificultad para tragar: algunas personas pueden tener dificultad para tragar debido a condiciones médicas como el esclerosis múltiple, la esclerosis lateral amiotrófica (ELA) o el accidente cerebrovascular. Una sonda nasogástrica puede proporcionar nutrición y líquidos a estas personas de manera segura.
Nutrición adicional: algunas personas pueden necesitar una nutrición adicional debido a una enfermedad grave o a la falta de apetito. Una sonda nasogástrica puede proporcionar estos nutrientes de manera efectiva.
Control de la cantidad de alimentos o líquidos: algunas personas pueden tener problemas para controlar la cantidad de alimentos o líquidos que consumen, como las personas con trastornos alimentarios o con demencia. Una sonda nasogástrica puede ayudar a controlar la cantidad de alimentos y líquidos que consumen estas personas.
Absorción de nutrientes: algunas personas pueden tener problemas para absorber los nutrientes de la comida debido a condiciones médicas como la enfermedad celíaca o la enfermedad de Crohn. Una sonda nasogástrica puede proporcionar los nutrientes que necesitan de manera efectiva.
Cirugía: algunas personas pueden necesitar una sonda nasogástrica temporalmente antes o después de una cirugía, especialmente si tienen problemas para tragar o si se les ha realizado una cirugía en la boca o el cuello.

Es importante tener en cuenta que la colocación de una sonda nasogástrica es un procedimiento médico y debe realizarse solo bajo la supervisión de un profesional de la salud. Es importante seguir cuidadosamente las instrucciones del médico o enfermero para asegurar que la sonda se coloque correctamente y se mantenga en buenas condiciones durante su uso.nu

¿Cómo colocar una sonda nasogástrica paso a paso?

La colocación de una sonda nasogástrica es un procedimiento que debe realizarse solo por un profesional de la salud. Los siguientes son los pasos generales para colocar una sonda nasogástrica:

Preparación: antes de comenzar, es importante lavarse las manos cuidadosamente y preparar el equipo necesario, como la sonda nasogástrica, guantes de examen y lubricante. También es importante asegurarse de que el paciente esté cómodo y en una posición cómoda, como tumbado de lado con la cabeza ligeramente inclinada hacia atrás.
Lubricación: se debe lubricar el extremo de la sonda nasogástrica con lubricante para facilitar la inserción.
Inserción: se debe insertar la sonda suavemente por la nariz y hacia abajo a través de la garganta y el esófago hasta el estómago. Es importante tener cuidado de no dañar la nariz o el esófago durante el proceso de inserción.
Confirmación de la posición: una vez que se ha colocado la sonda, es importante confirmar su posición para asegurar que se encuentra en el estómago y no en los pulmones. Esto se puede hacer mediante la medición del pH del contenido de la sonda o mediante la toma de radiografías.
Conexión a la fuente de alimentación o medicamentos: una vez que se ha confirmado la posición de la sonda, se puede conectar a una fuente de alimentación o medicamentos según sea necesario.

Es importante tener en cuenta que la colocación de una sonda nasogástrica es un procedimiento médico y debe realizarse solo por un profesional de la salud.

¿Cómo saber si una sonda nasogástrica está mal colocada?

Hay varios signos y síntomas que pueden indicar que una sonda nasogástrica está mal colocada:

Dolor durante la inserción o durante el uso de la sonda: si el paciente experimenta dolor durante la inserción o durante el uso de la sonda, puede ser un signo de que la sonda está mal colocada o que ha sufrido daños durante el proceso de inserción.
Falta de respuesta a la alimentación o medicación: si la sonda nasogástrica está mal colocada, es posible que el paciente no responda a la alimentación o medicación que se le administra a través de la sonda. Esto puede deberse a que la sonda no está llegando al estómago o a que el contenido de la sonda está escapando a través de la sonda y no está llegando al estómago.
Fiebre: si el paciente experimenta fiebre después de la inserción de la sonda, puede ser un signo de infección o de que la sonda está mal colocada.
Dificultad para respirar: si el paciente experimenta dificultad para respirar después de la inserción de la sonda, puede ser un signo de que la sonda está obstruyendo las vías respiratorias o de que ha sido colocada en los pulmones en lugar del estómago.
Vómitos: si el paciente vomita después de la inserción de la sonda, puede ser un signo de que la sonda está obstruyendo el esófago o de que ha sido colocada incorrectamente en el estómago.

Si se presentan estos síntomas o signos, es importante avisar inmediatamente al médico o enfermero para que evalúe la posición de la sonda y tome las medidas necesarias.

¿Te gustaría ampliar información sobre nuestros másteres sanitarios?

¿Cuál es el procedimiento de alimentación por sonda nasogástrica?

El procedimiento de alimentación por sonda nasogástrica varía ligeramente según el tipo de sonda y la fuente de alimentación que se utilice. En general, el proceso incluye los siguientes pasos:

Preparación: antes de comenzar la alimentación, es importante lavarse las manos cuidadosamente y preparar el equipo necesario, como la sonda nasogástrica, la fuente de alimentación y cualquier medicación que se deba administrar junto con la comida.
Conexión de la fuente de alimentación: se debe conectar la fuente de alimentación a la sonda nasogástrica según las instrucciones del fabricante.
Admistración de la comida: se debe administrar la comida a través de la sonda nasogástrica a una velocidad adecuada para evitar obstrucciones o vómitos. La velocidad adecuada dependerá del tipo de alimentación y del estado del paciente.
Administración de medicamentos: si es necesario, se deben administrar cualquier medicamentos que se deban tomar junto con la comida a través de la sonda nasogástrica.
Monitoreo: durante la alimentación, es importante monitorear al paciente para asegurarse de que está recibiendo la nutrición adecuada y que no presenta signos de obstrucción o vómitos.

Es importante tener en cuenta que el procedimiento de alimentación por sonda nasogástrica es una parte importante del cuidado de un paciente y debe realizarse cuidadosamente para evitar complicaciones.

¿Cuáles son los cuidados de enfermería para la alimentación por sonda?

Verificar la posición y el funcionamiento de la sonda nasogástrica antes de cada alimentación: es crucial asegurarse de que la sonda esté en el lugar correcto y funcionando adecuadamente antes de comenzar la alimentación.
Administrar la alimentación a una velocidad adecuada: es importante ajustar la velocidad de alimentación según sea necesario para evitar obstrucciones o vómitos.
Monitorear el estado del paciente durante la alimentación: es importante monitorear al paciente durante la alimentación para asegurarse de que está recibiendo la nutrición adecuada y que no presenta signos de obstrucción o vómitos.
Limpiar y desinfectar la sonda nasogástrica y el equipo de alimentación de acuerdo con las instrucciones: es importante mantener la sonda nasogástrica y el equipo de alimentación limpios y desinfectados para evitar infe

Complicaciones

El uso de una sonda nasogástrica puede conllevar algunas complicaciones, incluyendo:

Infección: la sonda nasogástrica puede ser una fuente de infección si no se mantiene limpia y desinfectada adecuadamente.
Daño esofágico o estomacal: la sonda nasogástrica puede dañar el esófago o el estómago si se coloca incorrectamente o se usa de manera inadecuada.
Obstrucción: la sonda nasogástrica puede obstruirse si se acumula alimento o líquido en el tubo o si se coloca incorrectamente.
Vómitos: la sonda nasogástrica puede causar vómitos si se coloca incorrectamente o si se administra la alimentación a una velocidad demasiado alta.
Fuga de alimento o líquido: la sonda nasogástrica puede tener fugas si se daña o se coloca incorrectamente, lo que puede causar deshidratación o desnutrición.

Conclusión

En conclusión, la sonda nasogástrica es un dispositivo médico que debes de usar con precaución. Es una herramienta útil para proporcionar nutrición y medicación a los pacientes que no pueden tragar por sí mismos, pero es importante tener en cuenta que también puede conllevar ciertos riesgos y complicaciones. Si quieres saber dar un paso más allá en el mundo de la enfermería te recomendamos echar un vistazo para formarte en un máster de enfermería online de los másteres online de General ASDE.